top of page

Áurea

Él se encogió de hombros.

—Ya no importa.

«Ya no importa, ya no importa…» Aquellas palabras se fueron repitiendo como un eco en la cabeza de Áurea, mientras lo veía alejarse por el sendero que lo sacaría de su vida, mientras su mente trataba de descifrar qué le estaba pasando para sentirse de repente tan sola, tan abandonada otra vez.

—A mí me importa —musitó, viéndolo desaparecer tras los olmos del sendero—. Me importas.

Pero él ya no estaba para escuchar su confesión.

Posts
Vuelve pronto
Una vez que se publiquen entradas, las verás aquí.
Post recientes
Búsqueda por etiquetas
No hay tags aún.
Sígueme
  • Facebook Classic
  • Twitter Classic
  • Google Classic
bottom of page